Con mucha emoción conmemoramos nuestro segundo aniversario, defendiendo la verdad de Venezuela y las grandes causas de la humanidad, anclados en la diplomacia de los Pueblos y la diplomacia Bolivariana de Paz.

Agradecemos a todas las organizaciones, movimientos y personalidades que han colocado sus esfuerzos para defender a Venezuela y para construir junto a nosotros un mundo más justo.

Vivimos en tiempos de crisis, donde el sistema capitalista ha demostrado su incapacidad para resolver los grandes problemas de la humanidad y donde grandes intereses amenazan con acabar con los bienes de la naturaleza y generar nuevas guerras.

Es en la solidaridad entre los pueblos que logramos vencer todas las barreras, donde la empatía con el otro y la otra, hacen posible aspirar a una nueva sociedad cuyos valores se reflejen en ejemplos de humanidad.

Denunciamos el bloqueo y todas las manifestaciones de guerra híbrida emprendidas contra Venezuela y contra los pueblos que resisten las agresiones del capital, del imperialismo, del fascismo y del sionismo.

Debemos ser capaces de denunciar la injusticia en cualquier lugar del mundo y a la vez, en ser actores para la transformación de esas estructuras que sostienen al patriarcado, al racismo, al sexismo y a todo tipo de discriminación.

La diplomacia de paz y la solidaridad internacionalista son las herramientas que el Comandante Chávez nos dejó para encarar esa nueva época de transición al socialismo, que cada vez es más urgente alcanzar.

La formación es un elemento fundamental para estar a la altura de los grandes dilemas que confronta la humanidad. Saber de dónde venimos, nos ayuda a trazar la ruta hacia donde queremos llegar.

Luchamos por el respeto a la sabiduría de los pueblos originarios, por la construcción de un feminismo popular y socialista, por la construcción de una sociedad comunal y por el rescate de la memoria de nuestros pueblos.

En 2022 seguimos consolidando la solidaridad y la paz con los pueblos del mundo

Este año nos sumamos a la jornada de los Libros Rojos junto a editoriales de izquierda, concluimos nuestro II Seminario Internacional sobre Reparaciones y expresamos nuestra solidaridad con los pueblos de Cuba, el Sáhara Occidental y Palestina.

Recibimos a la Brigada Feminista Internacional «Alexandra Kollontai», y exigimos la liberación de nuestro diplomático Alex Saab.

Continuamos con nuestros foros y diplomados, porque es fundamental combatir la desinformación y ganar la batalla de ideas en los espacios que surgen a partir de las nuevas tecnologías.

Defendimos el derecho de los pueblos a la paz desde Guantánamo en el encuentro del Consejo Mundial de la Paz y alzamos nuestra voz contra la OTAN. Mientras vimos como avanza la consolidación del proyecto comunal en tierras zamoranas.

Recordamos los 20 años del intento fascista de derrocar al Comandante Chávez con un encuentro internacional que demostró que recordó que un pueblo en defensa de sus conquistas, puede derrotar a la ideología del odio.

Denunciamos la amenaza de lawfare contra nuestros pueblos pidiendo la liberación de Julián Assange y la devolución de la tripulación y del avión de Emtrasur a Venezuela. Una América unida como soñaron Bolívar y San Martín es la mejor fórmula contra el neoliberalismo.

¡Falta mucho por hacer todavía!

Desde Argelia hasta México; desde el sur del Bronx hasta Angola; desde Antalya hasta Caracas, vemos nacer un nuevo mundo donde transita la espada de Bolívar junto a su pensamiento y nuestro compromiso con la paz y la solidaridad .

«Siempre las almas generosas se interesan en la suerte de un pueblo que se esmera por recobrar los derechos con que el Creador y la naturaleza lo han dotado…» – Simón Bolívar, Carta de Jamaica, 06 de septiembre de 1815.

Carlos Ron, presidente del ISB